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Tucupita.- Esa tradición de ofrecerle una casa a un medallista para luego quedarle mal es casi tan vieja como la primera medalla que un deportista deltano trajo de unos Juegos Nacionales.

Jhosmer Ramírez, quien hace 9 años logró la hazaña para el Delta de dos medallas, recordó en una entrevista concedida a El Periódico del Delta, como la gobernadora Lizeta Hernández Abchi, le prometió una casa. Pero, en palabras del pesista, «todo se quedó en palabras».

Para el 2012, formó parte de la selección nacional de Venezuela, teniendo una actuación destacada en el Campeonato Mundial de Potencia, disputado en Polonia, donde conquistó preseas de oro y bronce.

Muchos son los casos del sector deporte que esperan ser tomados en cuenta por las autoridades regionales para la asignación de una vivienda.

Según un estudio social elaborado en el 2016, por el Ministerio del Poder Popular para el Deporte, Delta, es la única entidad que dificulta un hogar a los atletas ganadores de preseas.

Es importante señalar, que este joven por muchos años glorificó el nombre del estado, tanto a nivel nacional como internacional, teniendo en cuenta que otra situación similar se presenta en los gloriosos muchachos de la lucha olímpica.

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