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Durante tres días a canalete, tuvieron que navegar para hasta Tucupita, radicándose en el paseo Manamo

Atiborrados por abandono, la miseria, el hambre, la pobreza extrema y de invasiones extraños en la zona, los indígenas de la comunidad La Culebrita, en el municipio Pedernales, denuncian que en forma sigilosa, y bajo el manto de la oscuridad de la noche, en unas curiaras a canalete, huyeron despavoridos rumbo a la capital deltana en la búsqueda de la subsistencia, encontrándose ahora refugiados en el paseo Manamo, donde no piensan regresar hasta que les garanticen la paz y las atenciones que requieren en esos predios.

Aun cuando no quisieron revelar sus nombres por temor a ser agraviados por extraños invasores que han llegado a su comunidad, añaden que allá desde el año pasado, por una batería no funciona la planta eléctrica, no cuenta con una sede para la escuela, jamás les han construido una vivienda, ni cuentan con medicamentos, no llevan el Clap, la gente del gobierno solo los visita en las elecciones.

En fin, los tienen abandonados, lo que les ha ocasionado tener que emigrar en busca de los auxilios que requieren.

JOSÉ ÁNGEL GASCÓN

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