Compartir

Tucupita.- El desastre económico acentuado en Venezuela en los últimos años ha tenido sus consecuencias en el ámbito deportivo.

Uno de ese fenómeno golpea a la futura generación de muchos niños talentosos que han dejado de practicar deporte; simplemente por la condición de los calzados.

En el Delta es una de las tantas situaciones que se viven en los sectores más desposeídos; el talento se pierde a la vista de todos.

Ramón Alfonzo Gutiérrez, aseguró que para un pobre es imposible dedicarse al deporte de alto rendimiento por el precio de los implementos.

“Mi nieto es muy bueno jugando al fútbol, pero no tiene zapato, ese muchacho no sale del poli jugando todas las tardes; pero lo hace descalzo arriesgándose a una lesión”, dijo.

Por otro lado, el deltano consideró que el gobierno regional no implementa mejores acciones para desarrollar un deporte más moderno con mejores infraestructuras.

Este viernes arranca un campeonato de fútbol y de seguro muchos niños se quedarán tristes en casa simplemente porque no tienen calzados para jugar.

Deja un comentario