El Colegio de Médicos Veterinarios del estado Delta Amacuro muestra preocupación ante la relajación que acontece con la trashumancia anticipada, que se lleva a cabo a la vista de todos, sin cumplir con las obligaciones sanitarias (tuberculosis, brucelosis, etc), que según los especialistas del campo pudo evitarse.
«El actual tiempo seco no es ninguna sorpresa, se venía desarrollando desde hace meses, por tanto era cuestión de haber adelantado las tareas relacionadas con salud animal en un mes o mes y medio», asegura la directiva.
Explican el expertos que la reducción significativa de las aguas en un año excepcionalmente seco en el Delta, empuja anticipadamente el traslado de los animales desde el espacio «rescatado» de las inundaciones, y deteriorado por la acidez e infuncionalidad de los drenajes, hacia el delta donde la naturaleza sigue su curso y también, por razones no menores, desde las sabanas pobres del sur de Monagas a las llanuras deltaicas.
Aseguran que quien vive de los ganados siente la presión y se apresura. Los primeros que se marchan, sea en arreos o en chalanas, evaden las obligaciones sanitarias, salvo excepciones, «superando obstáculos» gracias a las vacunas que les aplican.
Reiteran que al estado actual de la situación se suma la pobre campaña de sanidad animal en Delta Amacuro donde, según reporte del INSAI con fecha 28 – 06 – 2023, fueron vacunadas en el primer ciclo contra la fiebre aftosa, 10.528 reses de las 100.000 existentes; y 569 hembras jóvenes contra la brucelosis, de las 12.000 que debían haber sido inmunizadas.
«El abandono de la Campaña de Sanidad Animal en Delta Amacuro expone innecesariamente a la población al contagió de enfermedades transmisibles desde los animales al hombre (zoonosis), e incide negativamente en la seguridad alimentaria», acotan.
Desde el Colegio de Médicos se exhorta a las autoridades a cumplir y hacer cumplir las normas establecidas; a evitar que vacas y búfalos se constituyan en una amenaza para la salud pública, y a sumar a favor de la seguridad alimentaria, es tarea de todos: gremio, ganaderos y organismos oficiales responsables.