Quienes conocen a Delta Amacuro en cualquiera de sus comunidades y atractivos turísticos, quedan prendados, algunos recomendando los lugares y otros hasta planifican asentarse con sus inversiones.
Tal es el caso de una pareja que visitó a Tucupita, Héctor Guicaipuro Sulbarán y Ka Brito, abogado e ingeniero de profesión, decidieron conocer la Tierra del Agua y a pesar de la pandemia recorren destinos hermosos que nunca imaginaron como Tucupita y sus atardeceres.
El periplo ha sido largo, ya que vienen de la cuna del Libertador, hasta la Tierra del Agua donde abrazados por el Orinoco y el Manamo, quedaron impresionados. Esta pareja de enamorados se propuso que en el primer año iban a recorrer todos los estados de Venezuela.
Quedaron impresionados por varias cosas, una la hospitalidad del deltano, las actividades deportivas que más aman que es el futbol sala, y en cada esquina pueden ver niños y jóvenes practicando esta disciplina.
Les encantó la gastronomía incuidos los postres, entre otras tantas cosas. Preparan un recorrido fluvial para cuando se pueda y se les está ocurriendo traer su empresa de encomiendas «Rodando por Venezuela» e instalarse en Tucupita.
La majestuosidad de la Catedral Divina Pastora y el arraigo a la religión católica les llamó mucho la atención, así como el predominio del warao en esta su tierra. así como los templos a San José, San Pedro y San Antonio, para quienes quieran conseguir un novio deltano comenta Héctor.
Los visitantes apreciaron el contacto que pudieron realizar con algunos waraos apostados en las riberas del río en la ciudad de Tucupita.
Héctor y Ka les envían un mensaje a quienes no conocen el Delta a que a pesar de la pandemia, en la semana flexible visiten el Delta para que promoviendo el turismo, se mueva el sector hotelero y se activen los empleos directos generando ingresos en la región.
