Tucupita. Las estrictas medidas para prevenir la propagación de la pandemia y la insostenible crisis económica que afecta a toda la nación, han llevado a muchos deltanos a buscar opciones como vender algunas de sus pertenencias.
Sin poder trabajar durante la cuarentena, Ana Lucia Fernández, y otros vecinos del sector Delfín Mendoza, decidieron instalar en distintas áreas de sus casas ventas de garaje para subsistir económicamente.
Otros ofrecen servicios de barbería, peluquería, electricidad y plomería en sus domicilios; evidenciando que ni reuniendo todos los bonos del sistema patria aunado al pago de nómina, el pueblo no se sustenta ni siquiera para cubrir las necesidades básicas del hogar.
Según el señor Roberto Salazar, es imposible vivir bajo un sistema socialista que solo enriquece a una menoría y sucumbe a la más extrema pobreza a la mayoría de los venezolanos.
“No me importa las amenazas que me van a sacar de nómina, el pueblo deltano tiene que despertar y hacer algo en las próximas elecciones; primera vez que veo a mucha gente muriéndose de hambre y no tienen cómo sobrevivir, no merecemos esto”, dijo Salazar.