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A todas luces la violación de los derechos fundamentales son tangibles en este preso recurrente

Desde hace siete meses Gilber Caro, fue detenido por las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES)). A pesar de haber sido detenido varias veces, en esta ocasión, el diputado ha sufrido según sus familiares la rigurosidad de quien ejerce el poder, por ser diputado de la oposición.

Según organizaciones no gubernamentales, compañeros de partido, parlamentarios y su propia familia, en esta ocasión, su hermana tuvo acceso al detenido, quien ha padecido afecciones como amibiasis, debido a la calidad del agua que consume.

Caro le confesó a su hermana que «se estaba volviendo loco», el encierro se le ha hecho insoportable y hasta ahora las organizaciones que defienden a los presos políticos no han podido avanzar en su favor.

Yeidi Caro: “mi hermano me dijo llorando, que se está volviendo loco. Yo le pedí que fuera fuerte, que se aferrara y que leyera la biblia. Yo me siento muy triste desde que regresé de ese lugar, por mi hermano y por el trato que tuvieron conmigo”.

Por otro lado la parlamentaria Delsa Solórzano pidió a la Corte Penal Internacional, que abogue por la libertad de Gilber Caro. «La crueldad del régimen no tiene límites. El diputado Gilber Caro está aislado, en condiciones infrahumanas. Eso es tortura. ¡Es hora de actuar!», escribió la presidenta del partido Encuentro Ciudadano.

Con inf. de El Cooperante y Twetter

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