Compartir

Puerto Ayacucho.- 700 indígenas entre jivis, uwottüja y yeral han emigrado hacia Colombia y Brasil en lo que va de 2021, según alertó la ONG Fundaredes en su informe semanal, precisando que el desplazamiento se debe a la poca atención de las autoridades en las comunidades originarias.

El coordinador de esta organización en la entidad, José Mejías, detalló que de acuerdo a una encuesta aplicada se contabilizó a 240 indígenas jivi y uwottüja que han cruzado en lo que va de enero por el paso fluvial en el municipio Atabapo hacía la población de Puerto Inírida, capital del departamento Guainía, Colombia.

Asimismo, por San Carlos de Río Negro al menos 130 indígenas del pueblo Yeral se han desplazado a San Gabriel de Cachoeira, Brasil. Mientas que por las trochas existentes en el municipio capital Atures un estimado de 330 jivis han llegado a Colombia a través de Puerto Carreño, departamento del Vichada.

Mejías indicó que la situación en la frontera es preocupante, más para los indígenas que han decido emigrar por el peligro que corren en embarcaciones desconocidas que cobran en 60.000 pesos colombianos. Reveló que muchos de los que se van a estos países pasan necesidades extremas por falta de trabajo.

“En Brasil tienen la suerte de ser atendidos en refugios con comida, higiene y atención en salud”, dijo Mejías, quién señaló que en la frontera con Colombia la situación es diferente. “Hemos recibido reportes de hermanos indígenas quela están pasando difícil, duermen en parques y plazas, no encuentran trabajo”, acotó.

Sostuvo que “es responsabilidad de los entes gubernamentales atender las necesidades de las comunidades indígenas y evitar que esta situación se agudice cada vez más”. Mejías expresó que “la gobernación en conjunto con las alcaldías de estos municipio deben implementar planes en beneficio de las comunidades”.

FUNDAREDES

Deja un comentario