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Repentinamente cambió las instalaciones del hospital Razetti en Tucupita, por una celda en la policía del estado Delta Amacuro.

Jamás se imaginó Adriana Carolina Acosta Flores, que viviría la peor pesadilla de su vida. Hasta hace poco iba a clases, era una comprometida estudiante de Medicina Integral Comunitaria, terminó su escolaridad y su deseo de aprender la llevó a incorporarse a la emergencia del hospital Razetti de la capital deltana. De esto pueden dar fe sus compañeros de trabajo y hasta el doctor Juan Gómez, muy conocido por su compromiso con los pacientes.

Adriana desde hace varios años quedó a cargo de sus tres sobrinos, cuya madre buscando mejor calidad de vida, se fue a trabajar a Trinidad.

La hermana de Adriana Carolina, no tuvo suerte con el padre de los niños y se los dejó a cargo a la mujer que se trasladó hace varios años a la vecina isla. Había prometido que al reunir un dinero le avisaría para que le llevara sus hijos.

Actualmente los niños tienen 7, 10 y 11 años. En muchas ocasiones se le trastornaba primero la asistencia a clases y posteriormente al trabajo, pero no se quejaba. Esperaba pacientemente cumplir con los niños y su hermana para no dejarlos sin los cuidados que ameritaban.

Adriana hizo su última guardia el 4 de junio y nunca pensó en viaje, hasta que su hermana la llamó para que buscara a la persona que la llevaría a Trinidad para entregar los sobrinos a la madre de estos.

La prisa fue tanta que a la hora de preparar ropa, documentos, entre otros, uno de los niños deja su registro de nacimiento. Se van a la parroquia Juan Millán a una casa donde los esperaban. Un hermano de Adriana, también menor de edad se marcha con el permiso de su madre, de ahí que sean cuatro niños. Por fin los menores cambiarían su panorama, su vida, su alimentación.

LA DENUNCIA

Hay un detalle que hay que observar bien. Son muchas las elucubraciones que surgen. No son solo quienes trasladan a estas personas, que se marchan voluntariamente, nadie va a vender a nadie, solo que no lo hacen gratis, ni de favor, hay demasiado por investigar.

Lo cierto es que los vecinos supuestamente denuncian, que allí en esa vivienda sucede algo. Tienen gente escondida, hacen la denuncia, incluso señalan que un camión JAC de la Guardia es quien lleva pasajeros a esa casa.

Finalmente los detenidos argumentan que hasta los vecinos querían dinero para dejar eso así y no llamar a la policía.

En las primeras de cambio Adriana sale en compañía de una hija de la dueña de la casa, necesitaba comprar algo y preguntó cómo salir y hacia dónde dirigirse. Acompaña a la jovencita y de regreso se consigue con el allanamiento, las detenciones y no la dejan entrar. Como siempre pensando en los niños, le dice a un funcionario que tiene ahí a sus hijos, porque así los considera, incluso así la llaman: mami.

Le permiten entrar y la retienen, primero la confunden con la hija de la dueña de la casa, cosa que queda aclarado y una fiscal le dice que no hay nada contra ella, sin embargo otro funcionario de igual peso le dice que la esposen.

La esposan en presencia de los menores y de los fiscales, los niños al ver la situación, comenzaron a llorar, todo fue confusión, a la niña le dio dolor de estómago, al varón mayor dolor de cabeza y finalmente, se los llevan al Cednna por tratarse de menores. Posteriormente el papá ausente los rescata y al hermanito menor su mamá.

La joven médico, como nada tenía que temer aunque la acusaban de cuanta cosa se les ocurrió, colaboró, entregó su teléfono, constataron que no tenía contactos que la involucraran, pero tampoco tenía dinero.

La operación la realiza el DIP y la Policía Nacional, una vez que la presentan en el Circuito, el Fiscal le da boleta de excarcelación, y le dice que ella no tiene nada que ver, pero sigue detenida en calle Amacuro.

LOS CARGOS

Los cargos que le están imputando a Adriana Carolina Acosta Flores son los siguientes: Tráfico de persona, tráfico de niños y niñas, asociación para delinquir, entre otros. Desde el día 5 está detenida, PNB la reseña, y el lunes es cuando se entera de todos los cargos que le imputan.

La llevan junto a otras personas que no conoce y le toman la fotografía que posteriormente es enviada a los medios.

Llama la atención que había un montón de personas y solo 7 son los detenidos.

A Adriana Carolina le dictan medida cautelar sustitutiva a la privativa de libertad, con presentación cada 60 días.

La Fiscal segunda del Ministerio Público, Gerlys Hernández, ejerció el recurso con efecto suspensivo, lo cual suspende la decisión del tribunal hasta tanto la Corte de Apelación decida al respecto y en este caso, la Corte declaró con lugar el recurso interpuesto por la Fiscal segunda, por lo que quedó privada de libertad.

Algunas personas se preguntan, ¿Si es inocente, por qué sigue detenida? Una prgunta para reflexionar. Una pregunta sin respuesta?

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