Jesus Reinosa a sus 72 años asegura que aún tiene fuerzas para desplazarse durante cuatro días en curiara desde su comunidad en el municipio Antonio Díaz estado Delta Amacuro hasta Tucupita para cobrar la pensión del seguro social.
Jesus Reinosa, indígena warao con 72 años de edad, asegura que viajó desde la comunidad de Bonoina hasta Tucupita en un recorrido de cuatro días y noches por los caños y ríos del Orinoco. El septuagenario afirma que es hijo de la selva, nacido en los morichales y manglares del Delta del Orinoco, a sus 72 años ha conocido a muchos gobernantes.
Con sus años a cuestas, recuerda que jamás vivió una época parecida a la que atraviesa el país. “se considera un gran líder de su comunidad” rememora el sabio indígena que se aloja junto a su parientes en la playita de Volcán populoso sector de Tucupita. De acuerdo a las informaciones de Reinosa, la travesía desde los caños hasta Tucupita es una ruta bien dura. El camino se hace tormentoso ante las adversidades que se presentan durante el viaje por los caños del Orinoco “los motores desaparecieron, no hay gasolina y el traslado se hace en curiaras impulsadas por canaletes” asevera.
Reinosa prefiere los caños y la tranquilidad de los ríos y los morichales, sin embargo, se ve obligado a viajar hasta Tucupita para cobrar la pensión y en busca de medicina y alimentos. “No hay dispensarios y los enfermeros desaparecieron ante la falta de remedios, ni siquiera para calmar una fiebre se consigue por allá” asegura.
Una denuncia que realizó Reinosa es que las grandes embarcaciones pasan a velocidad y aun cuando les hacen señas para que los vean y con temor a que sus curiaras se «trasbuquen» no les importa el pequeño bote. Mencionó a la ambulancia que viaja a los caños.
De acuerdo al testimonio del septuagenario, esta es la peor época que le ha tocado vivir. Para el anciano, los 40 años de democracia fueron los mejores tiempos “con todos sus defectos, tuvimos dispensarios, enfermeros en nuestras comunidades, medicina y comida” asegura.
