Tucupita.- Hastiados de convivir con olores putrefactos, enfermedades y la presencia de mosquitos y animales roedores, moradores del sector Los Cedros, denuncian que el desbordamiento de las aguas servidas ha generado un problema de salud pública en la zona.
Los vecinos alegan que tanto niños como ancianos han sufrido de enfermedades respiratorias y extrañas patologías en la piel. Hacen un llamado público a la ciudadana gobernadora Lizeta Hernández, para que tome cartas y de solución a esta problemática tan delicada.
“Mi hijo tiene apenas siete meses de edad y sufre de congestión nasal por los malos olores. Además, día y noche tenemos que soportar el mal olor en nuestros hogares, a tal punto que hasta nos afecta consumir nuestros alimentos”, denunció el señor Pablo Moreno.
Es importante destacar, que actualmente se vive una situación sanitaria, producto de la pandemia por COVID-19, la cual amerita una cuarentena social, pero no en condiciones inhumanas. Por último, exigen mayor presencia policial en horas nocturnas.