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La Fiscalía del Ministerio Público y la Contraloría General de la Nación, deben emprender las investigaciones sobre una cantidad de viviendas esqueléticas que dejaron inconclusas abandonadas en la comunidad rural de “Los Rastrojos”, como en todo el estado Delta Amacuro.
Debe ejercerse responsabilidades sobre estas programaciones que el Gobierno nacional ha fijado como beneficio para las familias más desposeídas y de pobreza extrema, que no cuentan con un techo digno que le garantice un mejor vivir.

Las inquietudes manifestadas en casi todas las comunidades deltanas, resaltan en esta ocasión en la población de “Los Rastrojos”, en la parroquia Juan Millán, del municipio Tucupita, donde es ampliamente notoria la necesidad que envuelve en la miseria a este vecindario, azotado por la pobreza y el abandono gubernamental, refieren así sus propios habitantes Lilianny Figueredo, Meddy Flores, Milixa Marcano, Susana Beria, Mayrelys Marcano, Meddy Flores, Alejandro Figueredo y otros moradores del sector.
Estos le solicitan a los organismos responsables de la construcción de estas obras, la culminación de este programa donde se ha invertido una millonada, y no se puede esperar que esta inversión se pierda alegremente y no se cumpla con los objetivos para lo cual fue fijada, y en una vecindad donde la mayoría está urgida de una vivienda digna, señalan.

José Ángel Gascón

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